Hace un par de semanas, yo y mi chico aprovechamos los días del puente de los muertos, y nos fuimos a Berlin. Ambos habíamos estado en esta ciudad, con lo cual nos tomamos estos días con relax, sin prisas por visitar tal o cual museo, y realmente nos fuimos de paseo. Y no hay cosa que mas me guste cuando estoy en un sitio nuevo, que perderme por sus calles. Y esto es lo que hicimos mas o menos, sin dejar de ver lugares emblemáticos por supuesto.
Hoy he decidido volver a escribir todos los posts atrasados que tenía pendientes. Y uno de ellos es el reportaje de la quedada con las queridas chicas del Club Handmade del mes pasado. Y como ya hemos hecho la quedada de este mes, en este post van los dos: una super dosis de fotografías que transmiten nuestra alegría y ganas de estar juntas, que cada vez es mas grande.
Entre tantas acciones callejeras, la de ayer, el Flower Bombing para el día de San Isidro en Madrid ha sido la que mas me ha emocionado, por haber tenido el honor de participar. La idea nace de las cabezas que nunca paran de idear de las Valentinas (que ilusión que tengan mi mismo nombre!) un escuadrón de tejedoras callejeras que ha nacido en una quedada del Club Handmade Madrid, con la idea de acabar con lo gris y sacar una sonrisa a nuestros vecinos, sin pedir nada a cambio.
Tenía muchísimas ganas de impartir ya este taller, y ahora, el día después, puedo decir de verdad: ha sido una maravilla de taller. Por supuesto lo digo desde el punto de vista de la tallerista. Y lo digo porque he visto como en pocas horas estas chicas han rotos sus esquemas, y hecho un enoooorme paso adelante en mejorar su fotografía! Las he visto irse con unas caras con enormes sonrisas, y esto para mi es mejor que cualquier tipo de comentario o palabra.
Ayer fue el domingo que todas las "chicas handmade" esperamos con ganas, el domingo en que llega la quedada del Club Handmade de Madrid. Un domingo estupendo, en el que ya estrenamos camisetas de mangas cortas y gozamos de este aire tan primaveral (casi veraniego diría yo).